Huevo, miel, aceite de oliva, aceite de coco, vinagre de manzana… Muchos son los productos naturales que se han utilizado tradicionalmente para producir champús caseros, mascarillas o remedios para corregir el exceso de grasa o la aparición de caspa. El deseo por tener un pelo sano ha despertado un creciente interés por los productos naturales para el cuidado del cabello, incorporándolos en la cosmética natural. Estos son algunos de estos productos y sus propiedades.
Los antiguos egipcios atribuían la suciedad del pelo al exceso de sebo capilar. Para regularlo, fabricaban un jabón líquido a base de agua hervida, zumo de limón y hiervas aromáticas. Es considerado el primer champú de la historia.
En la antigua Grecia, para el lavado del cabello se empleaban sustancias exóticas como el aceite de yoyoba, el agua de flores, la lavanda, la camomila o el romero.
En la edad media ya se empieza a utilizar la sosa y la potasa para elaborar jabones. Acción que se implementa de manera industrial usando productos químicos a lo largo de todo el siglo XX.
Curiosamente, junto al desarrollo de la industria química cosmética, han pervivido a lo largo de los siglos remedios naturales para el cuidado del cabello, transmitidos de forma oral de generación en generación.
Según nos comentan desde La Herboristería online, de unos años para acá, se ha despertado un interés en un sector cada vez mayor de la población por utilizar productos naturales en la limpieza y cuidado del pelo, en detrimento de otros productos químicos o sintetizados en laboratorio.
En la actualidad, algunos de los ingredientes empleados en la elaboración de remedios tradicionales los encontramos en los artículos de aseo capilar.
El germen de trigo potencia que el cabello crezca más fuerte.
El germen de trigo es la semilla de la cual brota la planta. Es la parte del grano que contiene una mayor proporción de proteínas y nutrientes. Se obtiene a partir de la molienda.
Contiene vitamina E, ácidos grasos y minerales como el Zinc. Promueve el crecimiento del cabello, tanto en términos de longitud como de volumen. Sus vitaminas estimulan el crecimiento celular y la formación de tejido.
Tiene excelentes propiedades de hidratación, por lo que soluciona problemas de sequedad y falta de brillo. El aceite que desprende impregna de la raíz a las puntas, aportándole vitalidad a todo el cabello.
El germen de trigo se puede encontrar como ingrediente de muchos champuces y mascarillas. La revista Natursan nos recomienda que adquiramos productos donde el trigo sea de cultivo ecológico, así nos aseguramos de que no contiene ningún aditivo químico.
Si se utiliza en una mascarilla, no tiene efecto inmediato. No hay que aclararlo enseguida. Es recomendable dejarlo actuar durante varias horas. La mascarilla ha de aplicarse con el pelo humedecido, mediante suaves masajes circulares que extiendan el producto por toda la cabeza e impregne el cuero cabelludo. Al cabo de 5 o 6 horas se enjuaga con agua tibia.
Utilizándose una vez por semana de forma regular, puedes apreciar como tu pelo crece con más fuerza dando la imagen de un cabello sano.
La cebolla roja previene la caída del cabello.
Esta variedad de cebolla contiene una gran cantidad de quercetina. Una sustancia con fuertes propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
El cabello se puede perder por causas genéticas o por enfermedad: estrés, dermatitis, anemia o como efecto secundario de algún medicamento. En todos los casos, los folículos capilares se encuentran inflamados y piden a gritos un alivio.
La inflamación de los folículos es lo que hace que el pelo se caiga. La cebolla limpia en profundidad el cuero cabelludo, eliminando el exceso de grasa y la obstrucción por suciedad y elementos contaminantes. De esta manera se consigue que los poros no queden obstruidos y se oxigenen como realmente se merecen.
La quercetina es rica en vitaminas C y E, lo que nutre al cabello en origen, haciendo que crezca con más fuerza y grosor. El resultado es un cabello más denso y vigoroso, donde la alopecia va pasando a un segundo plano.
La cebolla roja se utiliza como ingrediente de champuces ecológicos, tratada para eliminar el olor, de forma que utilizando estos productos no tiene por qué olerte la cabeza de forma extraña.
No tiene efecto inmediato, por lo que es necesario dejar actuar al champú unos minutos. Es recomendable leerse bien las instrucciones del producto y aplicarlo según nos indican.
La quercetina surte efecto en poco tiempo. Por lo que si nos lavamos el cabello dos veces por semana con estos champuces, en pocos usos percibiremos los resultados.
El aguacate repara el cabello seco y dañado.
El empleo de planchas para el pelo, para rizar o estirar el cabello, el abuso de productos químicos o una mala alimentación pueden hacer que la melena se reseque. Que parezca pajiza, mustia, sin vida. Se necesita una hidratación profunda para recuperar su vitalidad natural.
Pocos conocen los efectos reparadores del aguacate sobre el cabello. La pulpa de esta fruta contiene una alta proporción de aceites grasos esenciales, poliinsaturados. Además, aporta a nuestro cabello vitaminas A, B y E, magnesio, calcio, hierro, y ligeros aportes de aminoácidos.
Sus nutrientes se absorben a través de los micro-poros de la hebra del pelo, hidratándolos y reparándolos, y por medio de los folículos capilares, realizando una acción sanadora eficaz para tratar enrojecimientos, picor o hacer frente a la aparición de la caspa.
Como indica la revista Mejor con Salud, la pulpa de aguacate se utiliza como base para elaborar mascarillas, tanto industriales como caseras, que se aplican sobre el cabello, una vez está limpio, y se deja actuar entre 30 y 40 minutos, para después aclarar con abundante agua tibia.
Se recomienda aplicarlas dos veces por semana e integrarla en las rutinas habituales de belleza y aseo del cabello.
El pomelo reaviva el color del pelo.
El pomelo es un cítrico con una alta proporción de vitamina C y elementos antioxidantes. Aplicado sobre el cuero cabelludo, estimula la producción de colágeno, una de las proteínas encargadas de conferir un aspecto sano y brillante al cabello.
Al igual que el limón, es un potente desengrasante y desinfectante, limpiado los folículos de los que nacen los pelos, aireándolos y promoviendo un crecimiento saludable.
El pomelo nutre, hidrata y protege. Reaviva el color del cabello, tanto si es original como si ha sido teñido con tintes naturales como la jena. Ofrece estupendos resultados en cabellos que han sido decolorados, devolviéndole el color original, perdido por la oxidación y los efectos de los agentes contaminantes ambientales.
A un nivel, el pomelo protege nuestro cabello de la acción de los rayos solares, la sal y el salitre, fijando durante más tiempo los tintes.
El pomelo lo podemos encontrar como ingrediente en champuces, mascarillas e incluso en tintes fabricados con elementos naturales. Tiene la ventaja de que se puede usar a diario. Es una fruta, que en este caso, en lugar de consumirla como ingesta alimentaria, la asimilamos por vía cutánea.
Proporciona brillo y vitalidad casi instantáneamente. Solo hay que dejarlo actuar unos pocos minutos, lo suficiente como para que el cabello absorba los nutrientes. Seguidamente, lo aclaramos con agua tibia. Deja un frescor y olor agradable en el cabello.
La ortiga blanca refuerza los cabellos débiles.
La ortiga es una hierba que tiene una gran cantidad de beneficios para la salud del cabello. Está especialmente indicada para tratar cabellos débiles o muy finos, con propensión a la caída.
Contiene grandes cantidades de vitaminas B1, В12, B5 (ácido pantoténico), C, D y Е; así como minerales como el hierro, calcio, sílice, azufre, potasio y manganeso.
El uso frecuente del extracto de ortiga en la limpieza del cabello estimula la circulación sanguínea en el cuero cabelludo. De esta manera fortalece la fibra capilar y consigue una limpieza profunda que oxigena la raíz del pelo.
Sus nutrientes penetran en la cutícula del cabello y lo hidratan en profundidad. Crean un film protector que fortalece el pelo dándole más cuerpo, grosor y brillo. Con el tiempo aumentan el volumen de la melena.
Por sus efectos regenerativos es un producto interesante para tratar casos de alopecia incipiente.
Otra de sus propiedades beneficiosas es la regulación del exceso de grasa en el cabello. Tonifica la estructura capilar, equilibrando el sebo que de forma natural segrega el cuero cabelludo y mejora el aspecto deslucido que suelen presentar los cabellos grasos.
La planta se sintetiza en una esencia o aceite natural que encontramos como ingrediente en champuces y tratamientos capilares. Su absorción es rápida, si bien es recomendable seguir las instrucciones que facilita cada fabricante para obtener unos resultados óptimos en la aplicación de cada producto.
Existe una gran variedad de productos naturales que tienen propiedades beneficiosas para nuestro cabello, y muy pocas contraindicaciones. En este artículo hemos hablado de algunas curiosas. Se sabe que el huevo aporta proteínas para que el cabello crezca más fuerte, que el aloe vera repara el pelo dañado, que el vinagre de manzana elimina la grasa del pelo. Los productos naturales para el cuidado del cabello son todo un universo por descubrir.
Una forma de cuidar, no solo nuestro aspecto, sino también la salud de nuestro pelo.