Este verano me he propuesto ser una chica “chic”, pero no tiene nada que ver con el anuncio dela APP (que, por cierto, odio) sino con intentar ir más mona y más “cool”. Sí, ya sé que suena pijo, pero es que estoy cansada de llevar siempre pantalones y camisetas que me hacen parecer más niña de lo que soy o, más bien, que hacen que parezca que visto como una adolescente de 12 años. Aunque la verdad es que no sé el motivo porque veo a todo el mundo, más o menos, vestir de manera similar y va genial, mientras que yo, con lo mismo, parezco infantil.
En mi opinión, visto como el 90% de la población menor de 40 años: pantalón vaquero y camiseta de manga corta, zapatillas o sandalias. Obviamente no voy a ir con esa vestimenta a una boda ni mucho menos, pero hablo de la ropa de diario, de esa que llevamos normalmente y de la que más abunda en el armario. A lo mejor es cuestión de aptitud o del físico que tengamos, no lo sé, pero lo que sí tengo claro es que este verano quiero triunfar.
No confundamos lo «chic» con lo pijo
Para empezar, he aparcado mis vaqueros a un ladito del armario y me estoy empezando a comprar pantalones y faldas de tela fina y estampado veraniego, o con colores planos para que combinen mejor con otras prendas. También quiero comprarme un par de vestidos, uno ibicenco y otro más elegante. Le he echado el ojo ya a la colección de alolola, me encanta, así que igual me pillo uno de los vestidos de ahí.
Yo creo que algo sencillo, elegante y algún accesorio chulo, puede ser el conjunto perfecto para una tarde de verano. Me compraré algún collar ancho de esos que se llevan ahora, unas sandalias blancas (las llevo queriendo desde hace un par de temporadas) y un bolso pequeño, de esos que llevan todas últimamente debajo del brazo. Reconozco que me siguen gustando más los bolsos con correa larga para colgarlos tipo bandolera, pero si lo que busco es ser “chic”, tengo que llevar un bolso “chic”. Probablemente optaré por uno de estos bolsos hechos a mano porque si me compro alguno de Primark, Mango, Zara o de las típicas tiendas de Centro Comercial, empezaré a ver a mil chicas que, como yo, llevan el mismo bolso, y lo que quiero es destacar, así que los bolsos hechos a mano me parecen la opción perfecta. Además, tampoco me voy a comprar veinte, se trata de tener uno o dos, como algo especial, nada más.
En el pelo no sé qué hacerme, pero también quiero cambiar. El problema es que estoy más gordita que el verano pasado y no paran de decirme que si me corto el pelo me voy a ver la cara más ancha y no me voy a gustar, así que no sé qué hacer, pero mi idea original era hacerme un corte moderno, con la nuca al aire para ir bien fresquita, y poder ponerme las cintas anchas de colores que se llevan tanto, tipo pañuelo atado a pelo.
Sé que no voy a poder cambiar todo mi fondo de armario y tampoco lo pretendo porque he de reconocer que me gusta mucho la comodidad que tengo al llevar vaqueros y zapatillas, pero sí quiero tener variedad para poder ir un día más mona, o para poder elegir qué tipo de estética quiero llevar ese día.
Hay ciertos looks que, por mucho que se lleven, sé que no puedo ponerme porque ni mi cuerpo ni mi actitud lo acompañarían, pero también sé que hay muchas más posibilidades que vaqueros y camiseta así que, simplemente, voy a buscar y abrir mi mente para ver qué encuentro y si soy capaz de hacerme un buen cambio de look sin pasar por el famoso “Cámbiame” de Telecinco que, además, hay días en los que dejan a las participantes peor de lo que llegaron, sinceramente.