¿Sabéis qué? Hoy soy yo la que va a pedir un deseo… y mi deseo es que todos los afectados por las participaciones preferentes ganen sus demandas y que los bancos que han estafado a la sociedad española paguen por lo que han hecho. Estoy realmente cansada de ver cómo algunos bancos quedan impunes tras estafar a todos los españoles y por eso recomiendo al mejor abogado de participaciones preferentes, al menos en mi opinión, porque ya no se puede aguantar más.
Para los que no están iniciados en el tema y no saben de qué estamos hablando sólo tenéis que buscar participaciones preferentes en la sección de noticias de google para alucinar un poco con nosotros. Pero vamos a daros algunos datos para que entendáis de qué va la cosa. De hecho, os lo voy a narrar como un cuento.
Érase una vez un grupo de ciudadanos que querían ahorrar y acudieron confiados a sus bancos para que les ofrecieran paquetes de ahorros o les aconsejaran sobre cómo invertir pero estos bancos, muy listos, decidieron estafar a sus clientes no explicándoles la letra pequeña del contrato que les aconsejaban firmar. Esta letra pequeña decía que estas participaciones eran perpetuas, para toda la vida, y que su rentabilidad no está garantizada, por lo que podrían tener su dinero sin poder tocar durante toda su vida invertido y no ver beneficio ninguno. Los ciudadanos, cuando se enteraron, se sintieron estafados, con toda la razón del mundo, pero los bancos querían esquivar el problema y salirse siempre con la suya hasta que aparecieron los abogados especialistas en participaciones preferentes que ayudaron a la sociedad española a hacer justicia y recuperar su dinero.
Obviamente esta última parte del cuento aún no ha pasado pero sería lo ideal, ¿o no?
Actualmente hasta la prensa extranjera se hace eco de lo que ocurre en España al respecto. En este vídeo del New York Times, Miguel Durán, explica un poco lo que ocurre.
No sé vosotros pero yo estoy indignada con todo esto y eso que no me toca a mí directamente pagar los platos rotos pero es que cada día que pasa me doy más cuenta de que al paso que llevamos o conseguimos meter en la cárcel a todos los listos de este país o acabamos todos peor de lo que imaginamos.
Yo no voy a cambiar el mundo por mucho que me lo proponga, ni yo ni cuatro más como yo, pero tal vez muchos unidos sí podemos cambiar las cosas y aún más cuando las leyes están de nuestro lado así como buenos profesionales del derecho que ponen todos sus medios por ayudar a las personas que, como muchos de los estafados con los preferentes, no les quedan ahorros con los que moverse.