La odontología ha cambiado mucho la cara en estos últimos años. Hasta no hace demasiado, acudir al dentista era sinónimo de pasarlo mal, dolores y no demasiado tacto en algunos casos. Ahora todo parece haber cambiado y se busca que el cliente esté en las mejores manos.
La proliferación de estas clínicas, hizo que naciera un boom donde no todas contaban con toda la experiencia e incluso también fueron noticia por la creación de franquicias que no terminaron siendo muy legales.
Si uno quiere buscar una buena clínica odontológica, lo que debe hacer es apostar por una que tenga dilatada experiencia. Un centro odontológico ejemplo de todo esto es el Centro de Odontología Avanzada ZM, que nació de la necesidad de crear una clínica dental en Toledo que respondiera a las necesidades de la clientela actual.
Ellos tienen claro cuáles son sus principios y la misión para llevarlos a cabo. Se buscan unos resultados basados en la excelencia y donde el diagnóstico previo adquiere gran importancia con la ayuda de las últimas y mejores tecnologías, una formación profesional continuada y que piensa en las personas no como un número sino como un paciente que pone su confianza en ella.
En esta clínica toledana, tanto en la capital como en Argés, se ofertan tratamientos de gran calidad, siendo expertos en todo tipo de ortodoncias, implantes dentales, estética dental, odontopedriatría y periodoncia.
Sabedores de sus buenos servicios, ofertan una primera visita completamente gratis, tanto para el público adulto como para el infantil.
Antes decíamos de la necesidad de encontrar una clínica con dentistas experimentados. Ellos llevan más de un cuarto de siglo de experiencia, combinando todo ese saber hacer con las instalaciones más modernas, que son fruto del trabajo en buscar las mejores condiciones donde realizar su labor profesional y para que los pacientes se encuentren realmente a gusto.
El tema económico en el mundo de la odontología sabemos que es algo que preocupa a los pacientes y ellos, sabedores que lo primero es la salud, pero a buen precio, no tienen problema para financiar a 12 meses sin intereses y pudiendo ser hasta en 5 años, ofertando garantía en todas las prótesis dentales.
En la primera visita gratuita, básicamente lo que hacen es valorar tu caso y así poder hacer un diagnóstico de calidad para que se pueda hacer un plan de tratamiento dental adecuado en el que se incluya:
Revisión completa.
RX y Diagnóstico.
Programación de una LIMPIEZA DENTAL (*Bajo prescripción médica)
Kit de Higiene Bucal ZM.
Plan de Tratamiento.
Cuando el paciente llega a su clínica, ellos te piden una serie de informaciones básicas cara a incluirlas en su historial clínico, que es de gran ayuda no solo para entender tu situación, también para que puedan prestarte una atención totalmente personalizada.
Finalizado, esto, te llevan al gabinete dental, donde los doctores te esperan y les puedes comentar si cuentan con molestias o deseas una revisión preventiva para que ellos puedan observar con detenimiento tu boca y dar cumplida respuesta a las dudas e inquietudes que tengas. Lo bueno es que te dan cita, en caso de que sea conveniente para una limpieza dental gratis.
Apostar de verdad por un buen servicio
Debemos tener en cuenta que una clínica dental no es un establecimiento de cosmética o de peluquería, es un centro sanitario donde se tratan enfermedades o dolencias de la boca. La odontología de calidad existe y va a seguir existiendo, donde el paciente realmente es una prioridad y se aleja del mercantilismo que muchos recién llegado han instaurado.
El hacer que un cliente vaya a una clínica u otra mirando siempre la más barata, no suele ser la mejor opción. Antes es bastante útil mirar realmente la experiencia y los medios con lso que cuenta la clínica en cuestión.
Si te equivocas, el resultado es que vas a tener que pagar el doble para que te reparen los “rotos” que te hayan hecho en la clínica barata e inexperta. Por todo esto, es por lo que los propios clientes somos los que debemos pedir un trabajo de calidad y que se base en esto por encima de otras consideraciones.
Al final todos terminamos siendo clientes y una mala odontología es sinónimo de una mala salud. Desechemos esto.