Cada vez son más las corrientes pedagógicas que defienden los múltiples beneficios de las actividades creativas para los niños y lo importante que es contemplar este tipo de actividades en la educación.
La creatividad y la Inteligencia Emocional empiezan a descubrirse como herramientas realmente útiles para afrontar muchas situaciones que se plantean en la vida y, si buscamos una educación completa debemos tratar de integrar también estas habilidades.
Y es que, cada vez más autores defienden esta máxima, autores como Ken Robinson con sus populares charlas en la plataforma TED, donde afirma que la “Educación mata la creatividad”.
Existen cada vez más corrientes en pedagogía que critican los modelos educativos basados en exámenes y un currículo centrado en la parte más racional y lógica del cerebro.
Nos estamos acercando a un modelo que contempla las Inteligencias Múltiples y entiende el Coeficiente Intelectual de un modo muy diferente al anterior, un nuevo paradigma educativo donde no existen unas materias más importantes que otras, sino sencillamente diferentes.
Beneficios de la Creatividad para los niños
La creatividad es una habilidad básica para resolver muchos problemas, ya que permite a quien la desarrolla la capacidad de plantear soluciones diferentes a un mismo problema.
Digamos que la creatividad es un músculo que debemos entrenar y, si bien, tenemos la noción de que unas personas son más creativas que otras, puede ser también una carencia en una educación que no nos orientó a desarrollar esta herramienta.
Las actividades creativas las relacionamos con las disciplinas artísticas y todas aquellas formas de expresión que estimulan nuestra imaginación.
Ya lo decía Einstein, “la imaginación es más importante que el conocimiento”, así que proponer actividades con las que entrenemos estas habilidades solo tendrá beneficios en materia educativa.
Las manualidades, por ejemplo, son una buena forma de ejercitar la atención, concentración, memoria, aprendizaje, cognición, pensamiento, psicomotricidad mientras fomentamos nuestra creatividad e imaginación.
Por esta razón, siempre me ha preocupado encontrar un colegio para mi hija de cuatro años que compartiera esta forma de entender la educación y le diera importancia a desarrollar estas habilidades.
Un colegio que en su currículum diera importancia a las Artes, en las que mi hija pudiera aprender danza o teatro.
Además, en su tiempo libre me gusta hacer actividades creativas con ella sobre todo cocinar, y hacer manualidades. De hecho, la última actividad que hacemos juntas fue propuesta suya.
Estamos haciendo pulseras, se trata de una actividad en la que mi hija puede desarrollar y afianzar muchas destrezas, mientras aumenta su agilidad y soltura con las manos. Es muy fácil, tan solo hay que reunir los materiales necesarios, darle un poco de estímulo y orientación y algunas ideas.
Además, los materiales son muy fáciles de encontrar, en mi caso recurrí a Cuerdas Valero, unos especialistas en cordelería que suministran todo tipo de cordelería, yo estaba buscando hilo sedal de colores, pero además de este tipo de hilo cuentan con muchos más.
Junto con los hilos tan solo se necesitan un par de abalorios y listo, es una manualidad muy sencilla de la que disfrutan mucho y con un montón de beneficios.
Al final, las actividades creativas son una forma estupenda de afianzar las relaciones entre personas, de encontrar una actividad para compartir y desarrollar nuestra creatividad al mismo tiempo.