
Los datos dicen que el 95% del transporte de mercancías en España se realiza por carretera, frente a apenas el 2% que representa el transporte por ferrocarril. La imagen de un camión por las carreteras es muy frecuente, y es que, ha sido desde siempre el medio al que han recurrido muchas empresas para llevar a cabo sus transacciones comerciales, debido principalmente al ahorro que se consigue tanto en tiempo como en costes, sobre todo si nos referimos al ámbito nacional. Por este motivo, se hizo obligatorio el crear una normativa para regularlo.
Ventajas
Son muchas las compañías que optan por utilizar el medio de transporte terrestre por carretera. Aunque el coste es superior al tren, su principal ventaja es la mayor rapidez, ya que en el transporte ferroviario los vagones se acoplan y desacoplan en varias ocasiones durante los trayectos. La verdad es que las ventajas son más que los inconvenientes.
Ventajas
- Transporte más rápido que otras opciones. Algunos pedidos pueden estar en menos de 24 horas.
- Es un tipo de transporte muy seguro y económico.
- Posibilidad de transportar cualquier tipo de mercancía. Grande, pequeña, peligrosa, o no, el transporte por carretera es perfecto para ello. Empresas como Transportes Cars son referentes en el sector y pueden hablar con conocimiento de causa porque son cabezas de cartel a nivel nacional e internacional en el transporte de vehículos por carretera, porque siempre han apostado por convertir nuestro logo en un sello de calidad en este sector, un sello que actualmente se deja ver en países como Holanda, Alemania o Bélgica entre otros.
- Único medio de transporte capaz de trasladar las mercancías puerta a puerta.
- Es el tipo de transporte más versátil y flexible.
Qué dice la ley
Estas son las premisas que hay que tener y que determinan y regularizan la transacción comercial, como la carta de porte, la consideración de mercancías peligrosas, la responsabilidad del transportista o los requisitos legales, entre otros.
Todo transportista tiene que llevar la carta de porte. Este documento determina los términos y condiciones del contrato de transporte por carretera, si bien no es obligatorio en caso de que ninguna de las partes lo requiera. La carta de porte debe incluir información relacionada con el lugar y la fecha de emisión de las mercancías, nombre y dirección del cargador y expedidor (en caso de que sea una persona diferente), nombre y dirección del porteador, lugar y fecha prevista de entrega en el destino, nombre y dirección del destinatario, número de bultos, clase de embalaje. Además tienen que ser firmada por ambas partes y es necesario emitir tres ejemplares (uno para el cargador, otro junto a la mercancía y un tercero para el porteador).
El porteador tiene la responsabilidad de responder económicamente ante la pérdida total o parcial de las mercancías, averías o retraso en los plazos establecidos, desde el momento en el que las recibe en el punto de origen hasta la entrega en el destino. Por tanto, el transporte de las mercancías debe realizarse bajo las condiciones acordadas antes de la transacción y sin que estas sufran ningún tipo de deterioro.
Fuera de la Unión Europea
En caso de que el transporte de mercancías por carretera se efectúe a nivel internacional, la documentación necesaria dependerá del alcance de la transacción comercial. Si el transporte se lleva a cabo dentro de la Unión Europea, la aduana de salida exigirá el documento T (T1 para el tránsito comunitario de mercancías importadas de países no pertenecientes a la UE y T2 para el tránsito comunitario interno).
En los últimos años, el sector del transporte ha tenido que reinventarse y amoldarse a los nuevos tiempos con los avances tecnológicos en materia de eficiencia, seguridad y sostenibilidad, el último estudio llevado a cabo por el Centro Español de Logística incide en que el sector de la logística y el transporte aún tiene algunos desafíos a los que debe enfrentarse a corto plazo.
Hay tres aspectos básicos en los que deben centrar los esfuerzos: la flexibilidad de las entregas, la incorporación de nuevas tecnologías y la apuesta por la sostenibilidad ambiental. Todo viene precedido por el auge del comercio electrónico y la digitalización de los servicios, estos dos aspectos están obligando a las empresas de transporte a optimizar su flexibilidad, ya que cada vez se apuesta con mayor ímpetu por acortar los plazos de entrega. Así, las empresas de transportes han tenido que avanzar.