Puede que de todos los materiales que hay para decorar, entre telas diversas y cerámicas, en el que predomina en mi hogar es el mimbre. Siempre he sentido debilidad por este material, ya que me transmite calidez y consigue que con solo poner un par de cestas de este material ya me dé la sensación de hogar.
Por otra parte, es un estupendo elemento de decoración. Y es que las cestas son accesorios útiles y muy bonitos si se escogen con gusto y casan bien con el entorno al que deben acompañar. Una de las formas más fáciles de lograr esta armonía es decorar nuestro hogar con cajas y cestas de materiales comodín como el mimbre, ya sea en su versión rígida, semi-rígida o tejida.
Son muchas las posibilidades que ofrecen las cestas de mimbre a la hora de decorar, además de sus posibilidades. A mí, por ejemplo, me parecen perfectas para mantener todo en orden y visible.
De hecho, estoy tan acostumbrada a comprarlas que ya piso encargos de varias online en Boras Hermanos, esta empresa viene dedicando su trabajo a la cestería de mimbre desde el año 1955. Siendo una tradición familiar, por lo que han aprendido la labor artesanal de fabricar las cestas de mimbre. Desde entonces, son todo un referente a nivel nacional en la fabricación de cestas.
Os comento, a grandes rasgos, algunas ideas para que empecéis a usarlas y sacarles el máximo partido, tanto funcional como decorativo.
Ideas para Decoración con Cestas de Mimbre
En toda casa tarde o temprano se necesita tener un arcón, un baúl o cajas organizadoras de gran formato, objetos que, además de decorar, nos sirvan para meter cosas dentro y ordenar nuestro espacio. ¿Por qué no escoger un baúl, arcón o caja grande de mimbre?
El mimbre tiene la ventaja de quedar bien en casi todas las estancias: cocina, salón-comedor, exterior, dormitorio, baño… Su tono neutro facilita combinarlo con muebles de todo tipo y, al ser un producto natural, aporta siempre un toque genuino y auténtico. A mí me recuerda a la casa de mi abuela a la que iba de pequeña, y puede que también esa sensación de familiaridad sea una de las razones de mi pasión por este material.
Puede que uno de los usos que más les dé a las cestas de mimbre es el de usarlas como medio de almacenaje. Ya sean las cestas de mimbre pequeñas y medianas, resultan perfectas para el almacenaje variado de todo tipo de objetos: menaje y cubiertos, utensilios de baño, toallas, alimentos, elementos de oficina, detergentes, botellas, revistas y libros, cosas de costura… Las cajitas de mimbre, especialmente las rígidas, son uno de los accesorios de decoración más útiles que existen. Y si además son así de bonitas, es difícil resistirse.
Si dejamos volar un poco nuestra imaginación y buscamos soluciones más creativas podemos, incluso, utilizar las cestas de mimbre como macetero.
Las cestas de mimbre son una manera perfecta de disponer y exponer tus plantas y flores, ya sean frescas o secas. A las cajas de mimbre rígidas de tamaño pequeño y mediano se suma aquí el mimbre tejido en forma de capazo, ideal si quieres lucir flores en la terraza o en el jardín de tu casa.